Creo que lo peor que le puede pasar a un niño es quedarse sin padres. Nigún niño debería tener que pasar por algo así, pero lamentable ocurre.
Cuando los padres desaparecen, sólo puede haber un consuelo para los niños, poder permanecer con sus hermanos. Estos cinco hermanos huérfanos lo tenían muy claro.
Bradley, de 11 años, Preston, de 10, Layla, de 8, Landon, de 6, y Olive, de 2 son 5 hermanos de Kansas (Estados Unidos) que han tenido que pasar por el terrible trance de perder a sus padres, pero ahora lo tienen muy claro, no quieren dejar que los separen.
La opción más sencilla para adopciones sería que cada niño fuese adoptado por una familia, pero ésta no es la mejor opción y la organización que se encarga de su costodia lo sabía muy bien. Para evitar que esto ocurriese decidieron publicar un llamamiento de los pequeños pidendo ser adoptados juntos en el periódico The Kansas City Star.
Los niños cuenta en su comunicado que suelen ir a la iglesia y que sus hobbies son los de cualquier niño de sus edades: bailar hip-hop, coleccionar Pokémon o jugar al fútbol.
Mientras los niños esperan en una casa de acogida, la respuesta ha sido abrumadora. La agencia que se encarga de la adopción, Adopt Kansas Kids, ha contado que su página web se ha colaptado de todas las visitas que ha recibido.
«Desde que se publicó su historia, el viernes pasado, creo que hemos recibido cerca de 1.300 correos electrónicos interesándose por los hermanos. Y lo mejor es que hemos identificado algunas posibles familias en las que los niños podrían encajar bien», cuenta a ABC News Teresa Freed, directora de comunicación del Departamento de Niños y Familias de Kansas. «Esta es la mayor respuesta que un niño o conjunto de hermanos ha recibido que podamos recordar», añade Teresa Freed.
Es inhumano separar a los hermanos, y parece que hay miles de personas en su cuidad que lo saben y están dispuestos a hacerse cargo de todos ellos. Esperemos que encuentren la mejor familia para estos pequeños. Todos lo niños merecen un hogar.
