Él la atormentaba en la escuela y 8 años después le pide una cita sin reconocerla. Ella le da plantón y le pide al camarero que le dé esta carta.

Dicen que la venganza es un plato que se sirve frío, en el caso de Louisa Manning, en Reino Unido, fue un plato que se sirvió prácticamente congelado, pero nunca es tarde para devolver elegantemente un agravio y dar a una persona una importante lección.

Louisa tenía 12 años cuando un chico mayor de la escuela la llamaba cosas terribles como “peluda” o “bestia humana”.

Se lo hizo pasar horrible, se burlaba de ella por estar algo gordita, lo que hizo que sufriera anorexia durante años.

El tiempo pasó y por suerte se recuperó. Hizo su vida y se convirtió enana mujer de buen ver.

La casualidad hizo que un día, Louisa se encontrara con el chico que la atormentó durante tanto tiempo diez años después.

Él empezó a flirtear con ella sin tener la más mínima idea de quién era ella, incluso se atrevió a pedirle que salieran juntos.

Ahí es cuando Louisa tuvo una gran idea, decidió aceptar quedar con él en un restaurante para cenar, sin la menor intención de acudir. Entonces pidió a un camarero que le entregase una foto y una carta en cuanto lo viera.

 

 

Louisa hoy en día es una mujer en su veintena bella y segura de sí misma, pero no siempre fue así.

A sus 12 años Louisa tenía sobrepeso y era objeto de acoso escolar. Uno de sus atormentadores más insistentes era un chico particularmente cruel. La llamaba por nombres horribles.

Diez años después, se encontró con el mismo chico, quien no la reconoció y empezó a coquetear con ella.

Fuente de la foto: Youtube

 

Fuente de la foto: Youtube

 

 

Ella aceptó tener una cita con él y el día señalado ella no se presentó. Entonces cuando el camarero le entregó al chico una vieja foto de Louisa y una nota escrita a mano.

 

Fuente de la foto: Youtube

 

La carta decía:

 

“Siento mucho no poder estar contigo esta noche. ¿Recuerdas en octavo cuando estaba gorda y te reías de mi peso? ¿No? Yo sí, me pasé los siguientes tres años comiendo menos de una manzana al día. Así que decidí saltarme la cena.

¿Te acuerdas de la uniceja de la que te burlabas? ¿Las piernas peludas que te asqueaban? ¿Te acuerdas de cómo cada día, durante tres años, tú y tus amigos me llamaban “bestia humana”? No, quizás no te acuerdas, o no me habrías visto ocho años después y apreciado lo suficiente como para tratarme como a un ser humano.

Pensé enviarte esto como un recordatorio. La próxima vez que pienses en mí, imagina a esa niña en esta foto, porque es la misma que te ha dejado plantado.

Louisa

El post de Louisa se volvió viral y al parecer el hombre se disculpó con ella. Te dejo este vídeo con más detalles sobre su historia.

 

 ¿Qué opinas? ¿Crees que Louisa manejó la situación correctamente? ¡Comparte su historia!