La chica humilla a compañeras gordas en internet – su padre se entera y le da la lección de su vida

Una de las peores cosas que una persona puede hacer es acosar a otro ser humano. Nadie merece ser acosado, ya sea un adulto o un niño. Por eso me enfadé tanto cuando leí esta historia y la verdad entiendo por qué este padre se enfadó tanto y no sabía que hacer al principio cuando descubrió lo que su hija estaba haciendo a otra chica.

Creo realmente que hizo lo correcto y espero que su hija aprenda la lección y que en un futuro entienda que el mundo necesita amor no odio. Porque todos nos sentimos mejor con un poco de amor...

Mi hija Callie es para mi una de las personas más dulces que conozco. Obtiene buenas notas, tiene buenos amigos, y todavía encuentra tiempo para ser una hija adorable. Nunca tuve que llamarle la atención en el instituto y nunca me dio razones para creer que se portaba mal.

Soy un padre soltero con tres hijas. Es duro, pero pensaba que lo estaba haciendo bien. Callie es la mayor.

Hoy recibí la llamada de una madre llorando diciéndome que mi hija estaba involucrada en el acoso de otra niña en la escuela. Callie y sus amigas tomaron fotos de la niña en posiciones “raras”, como inclinándose para recoger alguna cosa quedando expuesto su trasero. La chica tiene sobrepeso y creo que muchas de las fotos querían humillarla por su peso…

La madre dijo que su hija trató de cortarse las venas esa mañana y que estaba en el hospital.

Hoy Callie está en la playa y debería estar en casa en unas horas. Estoy tan enfadado que no sé qué hacer. Siempre le he enseñado a ser amable y respetuosa con los demás y siento que ni siquiera la conozco. Por lo que he oído, Callie era la líder de todo esto…

Eso fue hace unos días.

Como Callie tenía que volver a casa a las 8.30 esa noche recibí una llamada de ella a las 8.15. Dijo que iba a quedarse en la casa de X es noche.

Le dije: “No, necesito que vengas ahora”.

Ella respondió: “¡Ya estoy aquí!¡Adiós! Y colgó.

Decidí ir hacia ella en lugar de discutir por teléfono. Fui a la casa de su amiga y estaba vacía. Empecé a llamar a los padres de sus amigas y finalmente un hermano respondió y me dijo que estaban en el parque. Cuando voy al parque había como 30 chicos alrededor de un fuego. La vi con una taza junto a un barril de cerveza.

Normalmente no me enfado… Pero ya tuve suficiente. Fui directo hacia ella y le dije que no iba a montar una escena, pero que tenía que meterse en el auto conmigo. Ella se volvió otra persona: “¡Tengo casi 18 años!¡No puedes hacerme esto!¡Me estás avergonzando!.

Le di una bofetada. No estoy seguro de lo que le dije pero más o menos era algo así: ‘¡Deberías estar avergonzada! Has metido a una chica en el hospital por lo que tú y tus amigas han estado haciendo y ahora me mientas y estás bebiendo alcohol siendo menor de edad. Tu madre estaría tan avergonzada de ti, ya no se quién eres’.

Causé un revuelo, así que se metió en el auto y ahora está en casa. Le he quitado todos los dispositivos electronicos (laptop, celular, privilegios de TV). Le dije que tenía que loggearse en su cuenta anónima de Facebook y colgar un mensaje disculpándose e identificándose como la persona que colgó las fotografías. Cuando se metió en la cuenta miré inmediatamente sus publicaciones. No había publicado sólo sobre una persona. Esta página de Facebook estaba dedicada a reírse de los “nerds y solitarios” de la escuela. Deben haber como 50 fotos.

Ella colgó la disculpa y le dejé claro que no iba a hacer nada por el resto del verano. Todos los planes fueron cancelados hasta nueva noticia. Ella puede usar el teléfono fijo si lo necesita, pero sólo cuando yo esté ahí.

Otras consecuencias fueron las siguientes:

  • Terapia semanal obligatoria.
  • Servicios a la comunidad (Todavía investigando esto y buscando consejo).
  • Cuando la chica salga del hospital, Callie va a ir a disculparse con ella y la familia.
  • Saqué la puerta de su habitación. Nada de privacidad por un tiempo.
  • Todos los lujos que tenía en la casa fuera. Esto incluye: los costosísimos productos para la piel y pelo que le compré. Le di un simple champú, un acondicionador, gel y loción. Todo está en el garaje. También perdió su maquillaje (no se si mantendré esto prohibido). Saqué todo lo que usa de su habitación y básicamente tiene sólo libros y su piano. Le he dicho que lea y que trate de practicar con el piano que tanto pidió y nunca usó.

Le dije que se tomara la noche para pensar las cosas. Si quiere pelear conmigo mañana por la mañana añadiré más restricciones. Pero si cumple los términos del castigo entonces consideraré cuán largo sera”.

¿Qué te pareció la reacción de este padre? ¡Por favor, comparte esto para denunciar y poner fin al bullying en la escuela!