La novia va hacia el altar – pero rompe a llorar cuando el novio revela su impactante secreto

El día de su boda es para muchas personas uno de los días más importantes de su vida. Y plenearlo se hace con mucha ilusión y prestando atención a todos los detalles.

Para la novia Kim la ceremonia fue cualquier cosa menos lo que se había imaginado. De camino al altar ocurrió algo que ella nunca pensó que fuese posible. 

Kevin Taylor se rompió una pierna de joven. Los daños le llevaron a desarrollar distrofia muscular.  

Desde ese momento Kevin supo que su vida iba a ser diferente para siempre.

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Después de la operación que le tuvieron que realizar, supo que no iba a poder vivir la vida que había soñado. Hasta que conoció a Kim. 

kim

A Kim no le importó que fuese en silla de ruedas, lo que miró fue su interior, gracias a lo que Kevin sintió que podía ser él mismo con ella. 

– El interior es lo que cuenta, no el físico. Y su corazón completa todas las partes de su cuerpo, cuenta ella en el vídeo de abajo. 

Para Kim y Kevin fue amor a primera vista, y supieron pronto que quería pasar el resto de su vida juntos. 

Casarse era una paso que querían dar. Cuando llegó el día de la boda, las cosas no sucedieron como Kim había pensado. Antes de que ella llegase al altar, Kevin reveló algo que había mantenido en secreto durante varios meses: que podía caminar.

– Yo quiero que cuando el cura diga, por favor, pónganse todos de pie, yo también pueda hacerlo, cuenta Kevin. 

Así que realizó, en secreto, un entrenamiento y tratamiento para aprender a caminar. De esto la novia, por supuesto, no sabía nada. La cara de emoción de Kim en ese momento lo dice todo. Y, como es de imaginar, no pudo contener las lágrimas.

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El que ya era el día más importante de su vida, de repente se convirtió el más sorprendente y feliz. 

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El día en que por fin Kevin pudo levantarse de su silla para abrazar a Kim. 

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El vídeo de abajo está en inglés, pero es precioso ver ese momento (a partir del minuto 2:15) en el que no hacen falta las palabras. 

Mentiría si dijera que ese precioso momento no me ha hecho soltar unas lagrimitas. La fuerta de voluntad y el esfuerzo de Kevin, y el amor con el que Kim habla de él, me han llegado al corazón.