Muchos programas de talento muchas veces nos recuerdan que uno nunca debe juzgar el libro por su portada. Esta presentación es otro ejemplo más de esto. Un joven, llamado Lewis, se sube y para en el escenario completamente solo. Tiene una camisa negra y cuenta que va a cantar la canción "Let's Get It On". Pero rápidamente los jueces se ven bastante escépticos y negativos. Porque de repente entran unos "guardias de seguridad" e interrumpen todo el show. Pero las cosas no son como parecen.
Porque después de unos segundos el show comienza otra vez. Los guardias le dan el micrófono a Lewis otra vez y cuando se voletan…
Este show nunca se le va a olvidar al jurado ni al público. Y el juez Simon Cowell, que es conocido por ser muy estricto, hasta se pone rojo y se tapa los ojos.
Cuando el show se termina los aplausos no paran. Toma unos segundos de tu tiempo para que veas este clip que ya ha sido visto por varios millones.
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