Que los perros son entregados y leales, lo hemos oído muchas veces, pero lo de este can no tiene precio.
Ocurrió en Chica, en 2012, un paseante vio que el perro estaba sentado inmóvil en la acera, con las patas sobre una bici que estaba aparcada. El perro se tomaba muy en serio su trabajo, vigilar la bici para que no la robasen.
Lo que ocurrió cuando volvió el dueño, hizo que todos lo que estaban por allí estallasen en carcajadas. Míralo tú mismo en el divertidísimo vídeo de abajo.
¡Compártelo y haz sonreíro a todos hoy con estas geniales imágenes!
