15 pruebas de que los gatos no se preocupan para nada de tu privacidad.

1. Cuando tratan de llamar la atención cuando estás trabajando.

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2.”Si, yo me voy a sentar aquí.”

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3. Todos los que tienen gatos y han escrito cosas raras en Facebook entienden que es lo que ha pasado.

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4. Uno sabe que las rutinas de la mañana son un poco diferentes.

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5. Con un gato te puedes olvidar de todo lo que se llama privacidad.

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6. Uno sabe quién es el jefe.

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7. ¡Esto me pasa cada vez que me cepillo los dientes!

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8. “El protagonista se muere. Ya me puedes sobar la barriga.”

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9. “¿Me ves ahora?”.

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10. Puede ser que ellos te lean el libro.

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11. Esto dice todo sobre tener gato.

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12. Un gato se sienta justamente donde quiere.

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13. Cree que es muy miedoso. Pero es lo más tierno del mundo.

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14. “¡Termina, juega conmigo!”

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15. Este chico sólo quería jugar un poco, sus gatos querían otra cosa.

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