Los basureros se metieron en el camión y llevaron rápidamente el gato al veterinario.
Los veterinarios viendo lo mal que estaba el animal se pusieron de inmediato con los cuidados necesarios para evitar daños permanentes.
Como un milagro, se logró salvar al maltrecho gato, al que pusieron el nombre de ‘Miracle Maisy’ (milagro Maisy).
El olor a gasolina perdura y todavía está desnutrido, pero los veterinarios creen que el gatito se recuperará totalmente.
No puedo entender cómo alguien es capaz de hacer algo tan terrible a un pobre gato indefenso.
Afortunadamente esta vez la historia tuvo un final feliz gracias a la intervención de los dos basureros.
Comparte tú también si crees que los dos hombres se merecen un agradecimiento por haber salvado a la pequeña Maisy.
Probablemente la gata encontrará un nuevo hogar, donde sabrán cuidarla con el cariño y el respeto que todo animal merece.