La perrita había sido brutalmente maltratada y su herida estaba llena de gusanos. Shorty recibió todos los cuidados que necesitaba y la llevaron después a una protectora de animales para que pudieran encontarle un hogar, escribe Daily Mail.
El entrenador de perros Sam Chan decidó publicar fotos en Facebook de la pobre cachorrita para intentar encontrar al mosntruo que había hecho tanto daño a la pequeña Shorty.
Las fotos se difundieron rápidamente por internet y en poco tiempo habían sido compartidas más de 36.000 veces.
Sam vio que el corte era demasiado limpio como para tratarse de un accidente, alguien había tenido que cortarle el rabo.
La protectora en la que se encuentra Shorty publicó recientemente un vídeo en el que se puede ver a la perrita ya más recuperada.
Pronto estará lo suficientemente fuerte y lista para mudarse a un nuevo hogar.
Mientras tanto el caso está siendo investigado por las auridades veterinarias y Singapore’s Agri-Food para encontrar al autor de los hechos.
El maltrato a los animales es siempre terrible, afortunadamente hay siempre personas de buen corazón dispuestas a ayudar, sin ellas, Shorty no habría sobrevivido.
Publicerat av Mutts & Mittens Community den 26 april 2017
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