Kaylee Doonkeen y su marido se despertaron una noche al escuchar un ruido extraño. Era como si alguien estuviera llorando en su terraza. Cuando abrieron la puerta Kaylee vio quien era el que pedía auxilio.
Un cachorro abandonado estaba muy triste. No debía tener más de 3 meses y Kaylee notó de inmediato que algo le pasaba a sus orejas.
Kaylee pensó en un primer momento que el perro tenía las orejas para atrás pero cuando la ambulancia llegó al lugar se dieron cuenta de la terrible verdad.
Alguien le había cortado las orejas al perro. El personal de la ambulancia ha sido testigo de muchas cosas en su trabajo, pero esto era de lo peor en el maltrato animal que habían visto.
El perro, a quien bautizaron con el nombre de Rocky, fue trasladado de inmediato a la clínica veterinaria.
”No es lo que comúnmente solemos ver»
Por suerte el veterinario hizo una revisión a Rocky y confirmó que se recuperaría y no perdería la capacidad de oír.
”Hemos tenido varios casos crueles en los que han cortado las orejas a los perros pero no casos como este, en el que le las han amputado totalmente. No solemos ver comúnmente cosas como estas», cuenta Jon Gary de Animal Welfare a KEPR-tv.
A pesar de su experiencia tan traumática, Rocky se mostró como el cariñoso, fiel y lindo perro que era. No tenía miedo de las personas que le querían ayudar.
”Nunca podrá recuperar sus orejas. Pero poco a poco su piel crecerá y su capacidad auditiva no se verá perjudicada», dice a Jon Gary.
Las autoridades han intentado desesperadamente buscar al culpable de esta atrocidad, pero no es tarea sencilla.
Si encuentran al responsable, esta persona podrá ser procesada por maltrato y terminar en la cárcel. Gary comenta la importancia de que se resuelva este caso para tratar de evitar incidentes futuros.
La protectora de animales PETA ofrece una recompensa de 5.500 dólares a quien ayude a encontrar a la persona responsable de las lesiones causadas a Rocky.
Ahora Rocky comienza ya un nuevo capítulo en su vida.
El personal del Animal Welfare, en la ciudad de Oklahoma, que cuidó de Rocky, no da a basto. Muchos quieren adoptar a Rocky.
”Hemos tenido al menos de 50 a 60 llamadas», confirma Lyne Huffman de la protectora de animales. ”Y no soy yo sola la que recibe muchas llamadas».
Y muy pronto Rocky encontró a una familia adoptiva que le da todo el cariño que se merece.
¿Verdad que es fantástico ver cómo este pobre perro todavía tiene ganas de vivir y sigue adelante a pesar del traumático incidente que le ha ocurrido en su vida?
Realmente espero que sus torturadores lleguen a conocer las consecuencias de sus acciones y que se les encierre en la cárcel. Es hora de endurecer las penas en todo el mundo contra el maltrato animal.
Esto no se le puede hacer a un perro inocente, dale a me gusta y ¡COMPARTE si estás de acuerdo con ello!