El gigante Freddy vive en Essex, en Reino Unido, con sus dueños.
Fredy es un gran danés que hace que los otros gran daneses parezcan pequeños. Pesa 90 kilos y de la cabeza a las patas mide 230 centímetros de alto.
Cuando se sienta al lado de su dueña, Claire Stoneman, la mujer parece muy pequeñita.
Cuando adoptó a Freddy de cachorro ya sabía que se iba a hacer muy grande, pero no se podía imaginar que se iba a convertir en el «gigante» que es hoy.
En 2016 Freddy fue reconocido como el perro más grande del mundo, así figura en el libro Guinness de los récords.
Como te puedes imaginar, sus dueños se dejan una buena parte de sus sueldos en comida para este enorme perro.
A Freddys le encanta el pollo, pero su plato favorito es otro: sofás.
Freddy ha destrozado unos cuantos sofás ya.
– Ha llegado a ocurrir que al llegar a casa me he encontrado el sofá hecho pedazos esparcidos por el salón. Pero aún así Freddy es aún mi pequeñín y no me puedo imiginar un sólo día sin él, dice Claire al periódico británico Daily Mail.
Freddy, según sus dueños, es un perro tranquilo y bueno, y le gusta pasear con su hermana pequeña.
¡Le deseamos todo lo mejor a Freddy y su familia!