La ardilla era un bebé cuando la encontraron. En la foto se puede ver que sus ojos estaban mal.
La familia la cuidó y la alimentó. La bautizaron como Arttu.
Ella comenzó a sentirse mejor, más animada.
Cuando estuvo recuperada, la soltaron en la naturaleza, pero Arttu regresó. Quería vivir con su nueva familia.
Vieron que Arttu estaba ciega y que probablemente no sería capaz de sobrevivir por sí sola en la naturaleza.
Así que se quedó a vivir con la familia.
El animal se volvió muy dócil.
Siempre quería estar con ellos, y trepar por la casa.
Arttu era muy limpia, la familia le había preparado un lugar con periódicos en una esquina para que lo pudiese usar como váter.
A Arttu le gustaba jugar, y solía mordisquear las manos a la familia como si fuese un gato, pero siempre con mucho cuidado de no hacer daño.
Aprendió a reconocer a los miembros de la familia y no era tan dócil con extraños como con ellos.
Las uñas de Arttu nunca llegaron a ser tan largas como las de las ardillas que viven en la naturaleza.
Y la familia se las cortaba.
Intentaron soltarla en la naturaleza pero siempre volvía.
Arttur vivió 6 años con la familia antes de morir.
La enterraron en el jardín, y le dieron toda la comida que les quedaba a las ardillas que había en los alrededores de la casa.
Fuente de las fotos: Reddit
¿Pensáis también que esta familia ha tenido una de las mascotas más tiernas que hay? ¡Compártelo para que más personas conozcan la historia de Arttu!
Newsner Animales y la Biblia de los Animales estamos siempre del lado de los animales. Pon “me gusta” si tú también lo estás.