Los vecinos pensaban que estaban locos. ¿Vivir en un garaje? Pero mira el interior.

Whitney Leigh Morris es una diseñadora y bloguera que vive en Venice Beach, Los Angeles, junto con su compañero, Adam Winkleman…

…y con sus dos perros, Stanlee y Sophee.

Los cuatro comparten una casa de apenas 33 metros cuadrados, algo que parece imposible. De hecho, nunca fue diseñada para ser una casa.

La pequeña estructura fue construida en 1920 como un garaje para la casa principal, en la propiedad donde está ubicada. Pero después de que Morris cambiara su diseño, el viejo garaje se convirtió en un espacio para toda la familia, e incluye una habitación, living y cocina.

Lo que le falta en tamaño a esta casa lo compensa con su belleza. Morris sustituyó la vieja puerta del garaje por puertas de vidrio, colgó un gran espejo en la pared para dar la ilusión de más espacio y la decoró de forma sobria y espaciosa.

Cuando sus amigos los visitan, la pareja transforma el living en un comedor, simplemente poniendo un mantel en la mesa.

Morris ubicó la cocina en la esquina trasera y la separó del living con un sofá en forma de L. ¡Les cabe incluso un lavaplatos en ese pequeño espacio!

El dormitorio es muy acogedor y tiene mucho espacio para libros y guardar cosas.

Cuenta incluso con un espacio al aire libre, lo que gracias al clima de Los Angeles resulta ser un espacio ideal para cenas a la intemperie.

Fotos

Echa un vistazo a la cuenta de Instagram de Morris para encontrar más pruebas de que no necesitas vivir en un espacio tan grande para tener una vida hermosa.

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