No estamos bromeando. Desde el 6 de marzo, hasta Pascua, Del Hall, de Ohio, vivió únicamente con el néctar ámbar. Su inspiración vino de una dieta bastante extraña desarrollada por monjes del siglo XVIII en Baviera, Alemania.
Beneficios, beneficios, beneficios
Sin ‘hacer trampa» con su dieta una sola vez, Del logró perder peso al renunciar a la comida para la Cuaresma y no consumió nada más que cerveza durante 46 días seguidos.
«¡Me siento genial! Perdí 20 kilos. ¡Ni un truco! Planeo continuar perdiendo peso a través de un protocolo de ayuno intermitente y control de porciones», dijo a LadBible.
Avanzando
Del es empleado por la compañía cervecera Fifty West en Cincinnati, Ohio, y, créanlo o no, no se ha cansado de beber cerveza a pesar de su dieta loca.
Según la televisión sueca TV4, cuando se le preguntó acerca de renunciar a la cerveza, el dijo: «No, realmente me encanta la cerveza y nunca me cansaré de la cerveza. Cuando comí mi primera comida después de la dieta, lavé todo con cerveza».
Su dieta consistía en un poco de agua por la mañana, y luego entre dos y cinco cervezas al día, dependiendo de qué tan hambriento estuviera.
«Normalmente tomo mi primera cerveza en algún momento de la tarde y puedo tomar una cuando siento un poco de hambre. Tomo la mayoría de las cervezas en casa. Cuando llego a casa por la noche, es posible que tenga dos para beber. Tres cervezas en la casa y eso es casi un día típico», dijo.
¿Recomendable?
Todo lo dicho, a pesar del éxito de la dieta que ha seguido Del en perder peso, NO recomienda que otros sigan su ejemplo.
«No recomendaría a otros que lo intenten. Probablemente hay otras formas mejores de perder peso que son más saludables».
Enhorabuena, Del, héroe absoluto de la cerveza.
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