Fue precisamente el día de fin de año cuando la policía de Coconino, en Arizona, en los Estados Unidos, encontró a cuatro personas muertas en una casita en el bosque. La policía los identificó como la pareja de 32 años Anthony y Megan y sus dos hijos pequeños Lincoln, de 4, y Kingley, de 3 años.
A las 12:26, durante el año nuevo la policía recibió una llamada de un preocupado conocido de la familia. Según los hechos, varios amigos y conocidos trataron de ponerse en contacto con la familia, sin éxito. Un hora más tarde la policía se acercó al lugar y descubrieron que salía gas por la ventana.
Con un equipo protector entró la policía en la casa y descubrieron algo terrible – todos estaban muertos. Unos días más tarde descubrieron que había un error grave en el sistema de calefacción de la casa.
– Creemos que es una intoxicación por monóxido de carbono en la bomba de calor o algún tipo de fuga de gas, explica Jon Paxton, de la policía de Cononino a FOX10 Phoenix.
Pero no solo se usa el gas o butano para calefacción, muchos hogares usan el gas para cocinar.
Ahora los familiares, conocidos y amigos están consternados por lo ocurrido.
– Adoraba a su familia y a sus hijos. Era una persona muy querida, dice de Anthony Capitano su amigo Daniel Matlock .
– Esto es un terrible tragedia, especialmente cuando se lleva a dos niños pequeños, dice el vecino Chrissy Smith.
Lo que le ha ocurrido a la familia Capitano es una enorme tragedia, y le puede pasar a cualquiera. Se producen muchas muertes por intoxicación de monóxido de carbono, al usa sistemas para calentar o cocinar por fugas de gas.
Dolores de cabeza, mareos, vómitos, pérdida auditiva y visión borrosa son los síntomas más comunes, hay que estar alerta si se presentan.
La policía de Arizona ahora recomienda que todos instalen alarmas de monóxido de carbono y detectores de humo en sus hogares. Esto es algo en lo que todos deben pensar. ¡Comparte este mensaje para evitar que lo ocurrido a esta familia en Arizona vuelva a suceder!