No saber dónde está tu hijo debe ser una de las peores cosas que te pueden pasar. Cada año, la familia de Celeste celebraba el cumpleaños de su hija Zephany y no pasaba un día sin que pensara en ella.
Cuando la otra hija de Celeste, Cassidy, empezó a ir a clase en 2015 una de sus compañeras la impactó mucho. Algo le parecía familiar y ella y Cassidy eran muy parecidas.
Cuando Cassidy llegó a casa del colegio le contó a su madre este extraño encuentro.
Celeste inmediatamente tuvo un extraño presentimiento, así que su marido decidió ir a la escuela y tomó fotos de la niña. A verlas, una corazonada le confirmó que era su hija perdida pero todavía no tenía pruebas.
Llevaron las fotos de la chica a la policía, quien aceptó llevar a cabo un test de ADN.
Celeste quedó extasiada cuando vio los resultados, su intuición era certera: después de 17 años había encontrado a su hija. Resulta que Zephany había estado viviendo todo ese tiempo a pocos kilómetros de donde vivía su madre biológica.
La mujer que secuestró a Zephany fue arrestada, aunque sorprendentemente Celeste fue muy compasiva, incluso dijo que si la veía le daría un abrazo. La mujer había criado a Zephany como si fuera una hija propia y había hecho un buen trabajo.
Es maravilla que Celeste fuera tan compasiva con alguien que convirtió su vida en un infierno. ¡Qué mujer más increíble y empática!
Zephany fue llevada a un lugar seguro mientras espera que se decida su futuro. La mujer que la secuestró ha sido acusada de rapto y espera sentencia.
Comparte la historia del reencuentro de esta madre con su hija para recordar a todos que nunca hay que perder la esperanza.