Conductor de autobús ve algo en la cuneta – entonces para y se da cuenta de la gravedad de la situación

Ari Kimari acababa de sacar el autobús del garaje un martes por la mañana cuando vio algo fuera de lo normal. El suelo estaba cubierto de nieve y Ari notó algo oscuro tirado junto a la carretera. Cuando pasó aquel objeto extraño Ari pensó que vio que se movía, así que volvió atrás y miró de nuevo. 

«Era un hombre de edad media. Estaba vestido con sus pantalones, una camiseta y una chaqueta finas, con zapatos pero sin calcetines», contó el conductor de autobús al diario sueco Falköpings Tidning.

Facebook/Ari Kimari

Ari se dio cuenta de que el hombre se iba a morir congelado si se quedaba ahí, así que rápidamente le subió al autobús calefactado. 

Tenía poco tiempo y pensó que los servicios de emergencias iban a tardar demasiado, así que llevó al hombre a la calentita sala de espera de la principal estación de autobús.

Ari entonces regresó a la ruta de su autobús y volvió a la estación unas horas después. El hombre todavía estaba en la estación, pero con él estaba una persona que decía conocerle y que le iba a ayudar.

Ari explicó a Falköpings Tidning, «¿A quién acudes cuando pasa algo así? Lo resolví a mi manera y me aseguré de sacarlo del frío. Obviamente, quería hacer más por él, pero dicho esto no sabía a quién contactar».

Es entendible que Ari no sabía qué hacer, pero si no se hubiera detenido nadie habría notado al hombre en la nieve.

El mundo necesita a más gente como Ari, que intervenga cuando alguien está en apuros. ¡Compárte esto si estás de acuerdo!

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