Nena de 20 meses usa el casco de su padre, un bombero australiano, y se niega a separarse de él en su funeral

Mandatory Credit: Photo by DEAN LEWINS/EPA-EFE/Shutterstock (10519462as) Charlotte O'Dwyer, daughter of late New South Wales (NSW) Rural Fire Service (RFS) volunteer Andrew O'Dwyer, wears her father's helmet during a funeral, at Our Lady of Victories Catholic Church in Horsley Park, Sydney, Australia, 07 January 2020. Horsley Park brigade volunteer firefighters Andrew O'Dwyer, 36, and Geoffrey Keaton, 32, died on 19 December 2019 when their truck overturned after a tree fell into their path as they were battling to contain a bushfire near the town of Buxton. Australia bids farewell to firefighter who died battling bushfires, Sydney - 07 Jan 2020

Estas desgarradoras imágenes están circulando en internet, mostrando a la hija del fallecido bombero Andrew O’Dywer, Charlotte, de tan sólo 20 meses de edad, dando a su padre su último adiós.

Andrew, de 36 años, murió combatiendo lo incendios que están arrasando Nueva Gales del Sur, en Australia, cuando el camión donde él y otro bombero voluntario viajaban se saliera de la carretera al caer un árbol el 19 de diciembre.

La hija se quedó al lado del ataúd durante el funeral el martes, llevando su casco y una medalla.

Geoffrey Keaton, de 32 años, y padre también de un niño de 20 meses, murió junto con Andrew mientras combatían las llamas al sur de Sydney.

Según los reportes, la pequeña Charlotte se negó a alejarse de su padre durante el funeral del martes, que tuvo lugar en la Iglesia católica Our Lady Victories.

El bombero fallecido fue premiado póstumamente con la medalla al servicio por el SErvicio rural de fuegos (RFS) en el funeral, mientras que el comisionado Shane Fitzsimmons pronunció un sentido discurso describiendo a Andrew como un héroe.

“Charlotte debería saber que su padre era un hombre especial, que se fue porque era un héroe», dijo según Daily Mail.

Los efectos de los incendios forestales han sido generalizados y devastadores desde septiembre. Reportes dicen que el número actual de muertes humanas es de 25, mientras que más de 500 millones de animales pueden haber perdido la vida.

Descansad en paz, Andrew y Geoffrey. Nuestras oraciones y pensamientos están con vuestras familias en estos difíciles momentos.

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