Tan sólo usando vinagre blanco puedes hacer que la cáscara de un huevo desaparezca.
Parece magia pero es muy simple, mételo en un vaso con vinagre blanco, espera 48 horas y… ¡Voilá! La cáscara estará completamente disuelta.
Tan sólo conservará una fina membrana a través de la cual se podrá ver la yema del huevo.
Mira este experimento en el video que te dejo abajo.
¿A que está bueno el truco? ¿Piensas probarlo? ¡Comparte esto para que prueben a hacerlo los demás!