Su hija no despierta de la siesta, entonces la madre le mira la cara de cerca y se lanza hacia al teléfono

Creo que todos somos, a estas alturas, conscientes de que dejar a un niño o un animal en un vehículo calentándose al sol puede ser peligroso. Incluso en la sombra, el interior de un vehículo se calienta rápidamente cuando las temperaturas son altas. 

Ahora Jennifer Abma quiere advertir a otros padres sobre la muerte silencionsa que visitó su casa mientras su hija dormía la siesta.

Fuente de la foto: Jennifer Abma/Facebook

Fue a mitad de julio cuando Jennifer Abma compartió una escalofriante experiencia en Facebook.

Cuando Jennifer fue a ver cómo estaba su hija, mientras dormía una siesta, se dio cuenta de que estaba inconsciente por un golpe de calor, aunque la niña no había estado al sol. 

La razón ha dejado a la madre en shock y ha sido compartida miles de veces en internet, y muestra cláramente hasta qué punto es importante tener controlada la temperatura en el hogar, y lo que puede ocurrir si no se tiene cuidado. 

Fuente: Shutterstock

Esto escribió Jennifer en Facebook:

”ESTA fue mi tarde, el momento más horrible que hubiese podido imaginar nunca, ESTO es un golpe de calor grave.

No hay nada más aterrador que no poder despertar a tu bebé. ESTO es una clara muestra de que un niño no necesita estar al sol para verse afectado por un golpe de calor. 

Nos llevó 20 minutos despertarla y cuando la ambulancia llegó venía en ella personal extra para investigar, porque no teníamos ni idea de lo que pasaba ni lo que se iban a encontrar.

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Esto es una buena prueba de lo rápido que pueden cambiar las cosas. 

Anastasia se había acostado para dormir una siesta. Yo no sabía que hacía tanto calor en su habitación hasta que fui a despertarla y vi que estaba empapada en sudor, con la cara muy roja. Estuve intentando despertarla durante 15 minutos. 

La ambulancia llegó más rápido de lo que yo nunca me hubiese podido imaginar, le hicieron pruebas y vieron que su nivel de azúcar era de 1,2 cuando debería estar sobre 4. Le dieron glucosa y unos minutos después comenzó a llorar, muy asustada. 

No, lo que pasó no es mi culpa pero es difícil no culparse. Esto es una lección importante de la que espero que otros puedan también aprender y saber que es importante comprobar la temperatura de las habitaciones porque el calor de la casa puede ser igual de peligrosa que un automóvil caliente. 

Yo estoy aún en shock ante lo que ha ocurrido y pensando en lo que podía haber ocurrido si no hubiese entrado para ver cómo estaba. 

Tuvimos a Dios de nuestros lado ayer, y estoy muy agradecida al personal de la ambulancia y Jay que vieneron tan rápido como les fue posible».

Fuente: Jennifer Abma/Facebook

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