En junio del año 2015 Dee Dee Blanchard fue encontrada muerta en una piscina de sangre.
Su propia hija, Gypsy Rose Blanchard, fue sentenciada a 10 años de cárcel por ser cómplice en el asesinato
Pero nada era como parecía ser……
Sin exagerar ni un ápice – ésta es definitivamente la historia más truculenta y rara de todas las historias criminales que he oído en la vida.
Desde que era una niña pequeña, Gypsy ha tenido que luchar contra varias enfermedades crónicas.
Cuando cumplió 7 años, los médicos le diagnosticaron a la pequeña una distrofia muscular, una enfermedad que ataca a los músculos. La enfermedad también afecta al esqueleto, el estómago y el corazón.
Su madre, Dee Dee, siempre estuvo apoyando a su hija y luchó para que la niña recibiera los tratamientos correctos para cada diagnóstico.
Dee Dee hablaba a menudo en público sobre las complicadas enfermedades de su hija. La familia despertó mucha empatía y recibió mucha ayuda de sus seres queridos e incluso de personas ajenas a la familia.
Madre e hija aparecían a menudo juntas en diferentes medios de comunicación y galas de benéficencia.
¿El resultado? A Gipsy y a Dee Dee les llegaban muchas donaciones y dinero. Muchas personas de todo el país donaban dinero para hacer frente a los costosos tratamientos y para que pudieran sobrellevar el día a día.
Durante más de 10 años Gypsy estuvo sentada en una silla de ruedas y pasó por diferentes tratamientos médicos junto a su madre. Dee Dee era admirada y considerada como una madre ejemplar por los médicos y los miembros de su familia.
Pero las autoridades, y el resto de mundo, iban pronto a descubrir la verdad. Y todo salió a la luz a raíz del asesinato de Dee Dee el 14 de junio del año 2015.
Aunque su madre había declarado que Gypsy era una adolescente que padecía una enfermedad incurable y que además tenía la capacidad mental de un niño, Gypsy en realidad tenía 23 años y podía andar.
El asesinato puso en evidencia la enorme mentira que envolvía toda su vida, ya que Gypsy era una persona plenamente capaz.
Gypsy afirma que su madre la obligó a fingir y vivir como si estuviera enferma e incapacitada la mayor parte de su vida.
Durante mucho tiempo la madre consiguió convencer a los médicos de la situación que sufría Gypsy. La recetaron miles de medicinas innecesarias y realizaron complicados y abusivos controles – que nunca jamás necesitó.
La hija era una importante pieza para una terrible y enfermiza metira. Al final era Dee Dee la que cosechaba los frutos y con esta mentira se hizo rica a costa de los demás.
Durante la investigación tras el asesinato de Dee Dee, donde se interrogaron a todas las personas más cercanas a la pareja, la policía descubrió por fin la verdad. Gypsy confesó que ya no podía soportar más el uso y abuso que sufría por parte de su madre – y por eso la mató.
Actualmente Gypsy Rose Blanchard está en la cárcel al ser condenada a 10 años de prisión.
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Parece horrible saber que una hija a podido matar a su propia madre, pero no es menos cruel lo que le hizo pasar la mamá a su hija. ¿Qué opinas sobre lo que hizo la hija? ¿Es justificable?
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