Las emociones que uno tiene como adulto no se pueden comparar con las emociones que uno tenía de niño – cuando todo alrededor era tan nuevo y interesante que a veces te sentías abrumado.
Esta historia trata de una niña que adora mirar a los aviones cuando despegan y aterrizan. ¡Muchos de nosotros recordamos lo fascinante que eran ciertas cosas cuando eramos pequeños! Como cuando la madre de esta niña la llevaba al aeropuerto para mirar a los aviones, y ella disfrutaba muchísimo.
Pero lo que no sabía era que su mamá había planeado una sorpresa secreta…
Había una persona a la que esta niña echaba mucho de menos.
Su papá era soldado y había estado ausente durante un tiempo. Aquellos que tienen personas de su entorno que suelen estar ausentes saben lo difícil que se hace esa ausencia y como los días pueden parecer meses, sobre todo para los niños. No sé puede describir lo mucho que se les necesita y lo frustrante que es no poder abrazarles – sobre todo para niños con una fuerza emocional grande.
La pequeña está pegada a la ventana y sigue con la mirada a los aviones. De repente su madre se la lleva de allí unos metros más allá y le dice: ¡Mira allí! La niña se gira hacia el lugar que le indica su madre sin tener ni idea de lo que le quiere enseñar. ¡Y entonces llega ese momento en el que ve a su padre –y su reacción es increíble! Y se percibe la honesta y sincera reacción de los niños.
Saca el pañuelo y mira el siguiente vídeo <3
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¡Me gustaría que uno dejara fluir sus sentimientos y mostrara más a menudo y como en este caso, una inmensa felicidad!
Muestra este vídeo a todos con los que quieres 🙂
