"Aunque falten lo esencial, como a mí que me faltan los brazos, siempre hay una segunda opción, para mí son los pies", esta es la gran lección de vida de Adriana Macías. Esta mexicana nació sin brazos pero eso no le ha impedido lograr nada en la vida. Es abogada, conferenciante, escritora y madre. Y todo lo hace magníficamente con sus pies. Su historia ha dado la vuelta al mundo y ha inspirado a muchas personas que habían perdido la esperanza. A mí me ha dejado impresionada y por eso lo comparto con vosotros abajo. Su historia se merece ser contada y compartida.
Adriana Macías llegó a este mundo hace 37 años, en México, sin extremidades superiores.
Pero esta “niña de los garfios” demostró que no existe impedimento para seguir adelante en la vida. Se adaptó y demostró que podía llevar una vida normal. Sus pies se convirtieron en sus manos y con ellos es capaz de hacerlo todo. Con ellos cocina, escribe, conduce, riega sus plantas…
A Adriana le dijeron que no podía estudiar la secundaria por su discapacidad, pero ella no se dio por vencida y hoy en abogada y escritora. Adriana escribe libros motivacionales que ayudAn a otras personas a vivir la vida como ella la vive, sin ponerse límites.
También imparte charlas. Como conferenciante ha conseguido que muchas personas que no veían salida a sus vidas hayan apartado de sus pensamientos negros pensamientos, incluso de suicidio.
Y su vida privada también está llena de éxitos. Adriana se casó con Juan Medina un catedrático especialista en discapacidad.Y se ha convertido en madre de una preciosa niña, Meritxell. El nombre no fue elegido al azar. A la virgen de Meritxell le crecieron mucho los brazos de ayudar y dar muchas bendiciones. Y la niña nació con unos preciosos brazos.
Adriana reconoce que no fue fácil los primeros días, pero ahora le prepara a la niña su leche, le cambia los pañales, juega con ella y lo más importante, la abraza con el alma, como ella misma dice.
Aquí os dejo un vídeo para que podáis conocer más sobre su historia.
Adriana es una gran mujer que se merece todo mi respeto y admiración. Le deseo todo lo mejor del mundo. Compártelo, seguro que puede inspirar a muchas personas.