Hay momentos en los que estoy realmente cansado de mi trabajo. Probablemente conozcas esa sensación, te levantas una mañana cualquiera y te duele la cabeza en solo pensar en otro día en la oficina.
Sin embargo, aunque de vez en cuando me queje y tenga días en los que lo único que quiero hacer es quedarme en la cama viendo la tele, nunca tengo que preocuparme de que mi trabajo me ponga en peligro.
Hay mucho que decir al respecto, aunque no sea un tema en el que tal vez pensamos muy frecuente. De hecho, es fácil olvidar que existen profesiones que no sólo suponen un reto mental, sino que también son peligrosas para las personas que las ejercen.
Ser bombero es una de estas profesiones. Personalmente, no creo que los bomberos reciban suficiente reconocimiento por la valentía que demuestran simplemente al presentarse a su turno cada día, pero hay una foto que está circulando por la red en este momento y que, con razón, pone a los bomberos – y a creado conciencia sobre las locas condiciones en las que a veces se espera que trabajen – en primer plano…
Cuando era más joven, soñaba con ser bombero – si mi carrera en la NBA no despegaba – pero hoy en día me gusta que otros lo hagan en mi lugar.
Llámenme cobarde, pero hay pocas cosas que me gusten menos que la tarea de lanzarme de cabeza a un edificio en llamas.
Afortunadamente para la sociedad, no todo el mundo piensa como yo. Hay almas valientes que arriesgan regularmente su vida para salvar a los demás y limitar el número de víctimas cada vez que se declara un incendio o se produce un accidente grave.
Y no nos referimos sólo a sacar a la gente de autos en llamas o entrar a apartamentos rodeados de llamas – y esto son actos heroicos, no falta decirlo – sino también a las veces en que los bomberos tienen la misión de combatir una de las fuerzas destructivas más aterradoras de la naturaleza: los incendios forestales.
Si usted vive en un país donde se producen incendios forestales, es probable que esté familiarizado con los daños que pueden causar. Por supuesto, no dejan de arder por sí solos y, si se les deja en libertad, destruyen prácticamente todo lo que encuentran en su camino.
Ahí es donde entran los bomberos. En lugar de huir de las zonas afectadas, como se aconseja a todo el mundo, se lanzan a hacer todo lo posible por detener el avance de los incendios, salvando innumerables vidas en el proceso.
Hace unos años, uno de estos incendios forestales arrasó Portugal y requirió la intervención de 1150 bomberos para frenar su propagación.
La escena apocalíptica era aterradora, pero dio lugar a una fotografía increíble que da testimonio del increíble trabajo que hacen los bomberos para mantener a salvo a la gente.
Según informes, un hombre llamado Pedro Brás publicó la imagen, junto con la leyenda: «Después de una noche y un día luchando contra el incendio forestal de Góis tuvimos derecho a 25 minutos en la playa fluvial, aunque estaba cubierta por el humo.»
La imagen en cuestión mostraba a un grupo de bomberos durmiendo al lado de la hierba, tan vencidos por el agotamiento que prácticamente se habían dejado caer donde estaban para poder descansar un poco.
Según Pedro, los bomberos se tomaron un breve descanso de 25 minutos después de trabajar sin parar durante 24 horas para combatir el incendio forestal.
No sé tú, pero yo creo que los bomberos de todo el mundo merecen más elogios y reconocimiento por lo que hacen.
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