Cuando mis hijos y yo estamos en casa en esos días gélidos de invierno, siempre me aseguro de que esté calentita y acogedora.
Algunas veces está algo fría, pero nada comparado con lo que Jesse y Maria Hulscher tuvieron que afrontar el pasado invierno en Minnesota, Estados Unidos.
Maria acababa de dar a luz a su segundo hijo y la familia esperaba llevar al bebé a una casa agradable y calentita. Entonces sucedió lo impensable: la estufa de la familia se rompió y su casa estaba congelada.
Con un niño de dos años en la casa y un bebé recién nacido por llegar en dos días, Jesse estaba preocupado.
"Entré en pánico al instante. Tengo a un niño de dos años y a un recién nacido por llegar a casa en un par de días, y esto fue antes de una potencialmente gran tormenta de nieve", dijo este padre a Fox9.
Jesse Hulscher se dio cuenta de que necesitaba ayuda, así que llamó a Magnuson Sheet Metal. Era fin de semana, pero el copropietario de la empresa, Craig Aurand, dijo que el reparador estaba en camino. Menos de una hora después, la casa de Jesse estaba calentita de nuevo.
Pero días después llegó la gran sorpresa cuando la familia miró su buzón y vio la factura.
Resultó que la empresa no quería que los Hulschers pagaran nada. Magnuson Sheet Metal escribió en la factura que la familia debía ahorrar su dinero para cuidar de sus niños. Fue un gesto increíble, pero no fue la primera vez que la empresa había hecho reparaciones para la familia.
Jesse colgó la imagen en Facebook e inmediatamente recibió muchísimos «me gusta» y comentarios de apoyo.
El dueño de la compañía, Craig, explicó a Fox9 que no lo hace por la publicidad, quiere ayudar a familias necesitadas. Resulta que la empresa a menudo ofrece servicios gratuitos a familias necesitadas.
Esta historia es un gran recordatorio de que hay mucho amor en el mundo y me devuelve la fe en la humanidad.
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