Historias de amor como ésta superan con creces a cualquier romance de película y demuestran que en muchos casos la realidad supera con creces la ficción .
Dolores Winstead, de 83 años, y Trent Winstead, de 88, estuvieron casados durante 64 años, tuvieron dos hijos, tres nietos y ocho bisnietos, y tras caer enfermos a la vez murieron juntos uno al lado del otro y tomados de la mano en un hospital de Estados Unidos.
La pareja siempre había estado muy unida. Pero recientemente la salud de Tren se deterioró y terminó siendo internado para recibir terapia intensiva por un problema de corazón.
Pocos días después, Dolores empezó a sufrir dolores de cabeza y le diagnosticaron un aneurisma cerebral, por lo que también fue internada.
El personal del hospital de Saint Thomas West Nashville aceptó entonces ubicar a la pareja en la misma habitación para que pasaran sus últimos momentos juntos.
Y así fue, Dolores murió a los dos días y, tan sólo horas después, le acompañaba su marido tomándole la mano. La familia afirma que es como si Dios hubiera organizado su viaje para que se fueran juntos.
Dicen que todos morimos solos, pero parece que Dolores y Trent son la excepción que confirma la regla gracias al amor puro que les unía. No olvides compartir su conmovedora historia con tus amigos.