Lo peor que le puede pasar a un padre le pasó a la mamá Maria Mancia en el año 1995. Un día cuando ella regresó a casa después de haber trabajado todo el día su hijo Steven, de 1 año, estaba completamente desaparecido. El niño había desaparecido de la casa de la familia en California en Estados Unidos. Resulta que alguien había secuestrado a su pequeño hijo y ella conocía muy bien a la persona que lo había hecho...
Cuando Maria regreso a la casa no encontraba a su hijo por ningún lado. Pero eso no era todo. Todos los documentos, fotos y recuerdos de su hijo también habían desaparecido. Hasta una foto de su ecografía había desaparecido.
Resulta que el ex-novio de Maria y el papá de Steven había secuestrado al niño. Steven estaba completamente perdido y nadie sabía dónde estaba. Para tener un solo recuerdo de su hijo una tia de Steven le mandó una foto del niño que tenía el el celular a la mamá. Maria sacaba esta foto cada vez que no aguantaba la preocupación y la ansiedad.
La vieja foto, en blanco y negro, era el único recuerdo que Maria tenía de su amado hijo.
Pero Maria y la policía nunca se rindieron. Ellos iban a encontrar al niño, no importaba cuanto tiempo se iban a tardar. Y de repente, después de 21 años, ocurrió algo inesperado en una ciudad lejos de donde vivía Maria.
Un ciudadano americano, llamado Steven, se había inscrito en una escuela en la ciudad mexicana, Puebla, para estudiar derecho. Y cuando la policía se enteró de esta información decidieron con cuidado contactar al chico para averiguar un poco sobre su vida y familia.
Preguntaron sobre su papá biológico y se enteraron que estaba desaparecido. La policía siguió averiguando y al fin le hicieron una prueba de ADN. La prueba mostró eu Steven era el hijo desaparecido de Maria.
”Durante todos estos años ella nunca había perdido la esperanza, pero había aceptado el pensamiento que nunca más iba volver a ver a su hijo. Tener la oportunidad de reunirlo con su mamá y su país natal es una honor indescriptible”, dice el policía Karen Cregg.
Steven no sabía que había sido secuestrado cuando era bebé y tampoco sabía que tenía una madre que había dedicado toda su vida para encontrar a su amado hijo. Él tampoco sabía que tenía cuatro hermanos que lo estaban esperando.
Cuando Maria por fin pudo volver a abrazar a su hijo nadie pudo contener las lagrimas.
”Yo he vivido todos estos años sin mi mamá, para luego enterarme de que ella está viva en otro país, fue muy emotivo”, dice Steven.
En el vídeo de aquí abajo puedes ver más sobre el increíble reencuentro entre Steven y su mamá: