El burro perdió a su mamá, pero mira lo que los desconocidos hicieron por él. ¡ Maravilloso!

Perry era muy pequeño y delgadito cuando llegó.

“Este es el pequeño de la otra noche, su mama murió en un accidente camino a Rincon, como ven es pequeño pero fuerte”, decía un post de la página de Facebook del Santuario de Burros de Bonaire tras su llegada.

El burrito empezó a comer. “Como ven está bebiendo de la botella y es tan dulce y valiente. Está con los otros huérfanos en el establo y no se siente solo”.

En este santuario Perry crecerá saludable y fuerte.

Pero Perry no es el único burro que han ayudado en el santuario. Han recibido a cientos de burros en los últimos 23 años. Pero cada burro es importante y el santuario se asegura de que cada uno viva lejos del duro trabajo al que son forzados muchas veces.

Fotos

Estamos tan contentos de que el Santuario de Burros de Bonaire haya dado a Perry una segunda oportunidad. Si tú también lo estás, visita su web y comparte esta historia con los demás.

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