Cualquiera que haya tenido un perro sabe que se puede crear un vínculo muy especial con este animal, se convierte en un miembro más de la familia. Así se sintió el policía Matt Hickey, de Marietta (Ohio) en Estados Unidos, cuando llegó el día de su jubilación, tras 30 años de trabajo. Después de haber trabajado con su perro policía, Ajax, durante 4 años, su único deseo era poder llevarse a su perro con él. Pero a Ajax aún le quedaban algunos años de trabajo, así que, de acuerdo a la ley, tenía que ser subastado y no podría acompañar a Matt Hickey en su jubilación. Esto partió de corazón de Matt. Hasta que sucedió algo increíble que lo cambió todo.
“El oficial Hickey vino cuando se retiró y nos dijo que quería comprar el perro, pero no podíamos dejar que lo hiciera. No era posible. Yo lo habría hecho, pero la ley no lo permite”, contó el jefe de policía Joe Matthew NBC News.
Los perros con edad para jubilarse se pueden vender a su ex compañero por un dólar, pero a Ajax aún le quedaban algunos años de servicio y, por lo tanto, debía ser legalmente subastado y vendido al mejor postor. Pero Matt no estaba dispuesto a darse por vencido, Ajax era como de su familia y Matt iba a luchar por el perro.
“Para mí fue como criar a un hijo”, cuenta Matt a NBC News.
Matt se quejó públicamente y consiguió el apoyo de los ciudadanos, que comenzaron a recaudar dinero para mantener a Matt Hickey y Ajax juntos. Llegaron a conseguir más de 70 mil dólares.
Gracias a su insistencia y al apoyo público que recibió, Matt pudo finalmente quedarse con Ajax por sólo un dólar. El dinero recaudado será utilizado para chalecos antibalas para otros perros de la policía que todavía están en servicio.
La lucha de Matt valió la pena, y los dos amigos podrán continuar su vida juntos, el mejor final para esta historia.
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