No son buenos tiempos para el gato del desierto. Se trata de una especie de felino bastante extraña del que quedan pocos ejemplares en el mundo, apenas poco más de 100.
Muchos de ellos viven en reservas y zoológicos, como es el caso de Rotem, una gata que quedó sola después de que su compañero muriera y que vive en el parque Gran Safari Ramat de Israel.
Rotem no parecía muy interesada en volver a aparearse, y eso a pesar de que sus cuidadores trajeron de Suecia a otro gatito de su especie llamado Kalahari.
Los cuidadores no sabían que hacer porque la pareja no parecía tener mucha conexión. Daba la impresión que Rotem estaba de duelo por la marcha de su excompañero.
No obstante, tiempo después cuando entraron en su recinto vieron a Rotem rodeada de tres gatitos.
Fue una gran noticia para este parque, ya que estos gatos originarios de Israel y Jordán ya están extintos en la región, aunque hay algunas subspecies que todavía deambulan por los desiertos del Norte de África.
Estos gatos son pequeños y pesan enre 1,5 y 3 kilos, tienen largas orejas y el color de la arena.
Hay muchos zoológicos en el mundo tratando de preservar esta especie, de ahí la importancia del nacimiento de estos gatitos.
Rotem demostró ser una gran mama y su alumbramiento arroja un rayo de esperanza en el futuro de esta hermosa especie.
¡Por favor, comparte las adorables imágenes de esta rara especie de gato con tus amigos amantes de los animales!.
