El gato Mikey de 8 meses fue salvado después de haber vivido en condiciones pésimas. Sus nuevos dueños pensaban que era un gato, pero luego se dieron cuenta que Mikey era una gata y que además estaba embarazada. Ella tuvo tres gatitos demasiado temprano y los tres murieron.
Mikey se deprimió y buscaba a sus gatitos todo el tiempo. Ella no podía entender que se habían muerto. La dueña de la gata, Hillary, no era capaz de ver a la gata sufrir más. Así que llamó a un sitio para gatos de la calle en Houston. Y ellos se pusieron contentos con su llamada.
Unos días después de que Mikey había perdido a sus gatitos uno había encontrado otros tres gatitos sin padres. No tenían más que una semana y necesitaban alguien que los cuidara. Así que llevaron a los gatitos donde Hillary y esa misma noche Mikey los empezó a cuidar como si fueran sus propios gatitos.
Ella los abrazaba, los lavava y le daba comida.
Ahora los gatitos van a crecer con una mamá y Mikey va estar mucho más feliz.
¡Qué historia tan linda!
Publicado por Newsner, danos like si te gusta: