Este retriever de 8 años fue encontrado abandonado en una playa. Su barriga estaba enorme a causa de un tumor de 20 kilos, según informa CBS Los Angeles. Cuando la organización de rescate fue avisada, ya sabían que salvar al perro sería caro, pero lo llevaron inmediatamente al veterinario.
A pesar de su tumor y de que su dueño anterior lo había abandonado cuando más lo necesitaba, era un perro positivo y alegre.
– Todo el tiempo no daba besos y movía la cola, cuenta Valerie Schomburg, una de las personas que se hizo cargo de él.
Cinco días después se realizó la operación, y afortunadamente todo salió bien. Henry ya se había deshecho de los 8 kilos de tumor y se convirtió en un perro mucho más feliz. Y todo fue gratuito porque se negaron a dejar morir al animal.
Ahora va a vivir en un refugio de animales donde lo tendrán controlado para asegurarse de que se recupera bien tras la operación. Y después de eso, le buscarán una familia que esté dispuesta a acogerlo con mucho amor.
Las fotos de Henry cuando está enfermo son duras, pero las fotos de después de la operación me llenan de alegría.
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