Los perros han estado encadenados toda la vida. Mira lo que pasa cuando unos extraños les liberan.

Mama y Oreo han pasado la mejor parte de sus vidas encadenados en el patio trasero de su dueño. Aunque desde su cautiverio podía ver a seres humanos el futuro de los animales se veía incierto. Afortunadamente, la Coalición para desencadenar perros supo de su situación antes de que las cosas fueran a peor. Así es como pasó.

“Mama y Oreo pertenecen a una mujer mayor que los rescató cuando fueron abandonados por unos vecinos”, explicó un representante de la Coalición para desencadenar perros, en Estados Unidos.

“Vive en una de las áreas más pobres de Durham y tiene poco acceso a recursos para cuidar de ellos. Cuando desencadenaron a Mama en noviembre, se la llevaron los de Control Animal. Pero en lugar de llevársela a un refugio donde la dueña tendría pocas posibilidades de recuperarla, los funcionarios de Animal Control se los devolvieron a la dueña y le dieron mi número”.

La misión de la coalición es “mejorar el bienestar de los perros viviendo continuamente encadenados a la interperie proporcionando servicios gratuitos de esterilización/castración, vacunas y mejorando la relación entre estos perros y sus compañeros humanos, a partir de una asistencia sin juzgar y compartiendo información diseñada para aumentar las expectativas de la comunidad en cuánto a los estándares de cuidado de las mascotas que viven en ella”.

Una característica muy particular de la coalición es que no juzga a los dueños de los animales. Tan sólo se enfoca en dar a los perros una mejor vida. Así que en lugar de quitarle a la anciana a Mama y Oreo lograron mejorar las condiciones de vida de los perros.

Como la dueña de Mama y Oreo tienen un patio, la coalición construyó dos grandes espacios cerrados para que los perros pudieran correr en ellos. Incluso pusieron heno en las casetas de los perros para que tuvieran un lugar blando sobre el que dormir.

Para entender verdaderamente lo que la coalición hizo por Mama y Oreo tienes que ver este video. La alegría de los perros es tan evidente en ese momento en que los liberan y es una prueba de que estos animales no deberían ser obligados a pasar una vida encadenados.

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