They say there’s a hell of a lot to learn from animals, that our furry-friends can teach us lessons we might not be taught otherwise.
Well, one incredible dog named Maggie seems to certainly back up that theory. At just five-years-old, this pooch has been through more than most people would endure in ten lifetimes.
She’s risen to viral fame after having been found in Lebanon with her eyes shot out, one ear cut off, and her jaw broken. All told, it’s believed Maggie had been shot 17 times before being dumped on the streets. She was also pregnant when she was found.
Dicen que tenemos mucho que aprender de los animales, que nuestros amigos peludos pueden enseñarnos lecciones que de otro modo no aprenderíamos.
Así es, una increíble perra llamada Maggie parece respaldar esa teoría. Con solo cinco años, esta perra ha pasado por más de lo que la mayoría de las personas soportaría en diez vidas.
Ella ha alcanzado una fama viral después de haber sido encontrada en Líbano con un disparo en los ojos, una oreja cortada y la mandíbula rota. Se cree que en total Maggie había recibido 17 disparos antes de ser arrojada a la calle. Maggie además estaba embarazada cuando la encontraron.
Afortunadamente, la historia de Maggie no terminó ahí. Rescatada por una organización benéfica de animales llamada Wild At Heart Foundation, fue finalmente adoptada por un amante de los animales llamado Kasey y reubicada en Brighton, Inglaterra.
A pesar de todo el trauma que había padecido y el dolor incalculable que debió haber sufrido, Kasey se convirtió en una perra de terapia. Hoy, incluso cuenta con un gran número de seguidores en Instagram.
«Esta persona en el Líbano publicó pidiendo ayuda y una mujer en Londres vio la publicación y recibió ayuda», dijo Kasey a The Argus
«Wild At Heart dijo que la acogerían, aunque es bastante difícil sacar mascotas de Líbano».
«Mi madre vio la publicación de Maggie y dijo que teníamos que acogerla.
«Llegué a casa, vi la foto y acepté».
Se necesitó una campaña en internet de seis meses para sacar a Maggie de Líbano, pero ahora ella está en auge. Con 80,000 seguidores en redes sociales a su nombre, Maggie recorre hospitales, residencias y universidades intentando ayudar a otros a sanar y ofreciéndoles atención.
Tras pasar los exámenes necesarios, Maggie es un cualificado perro de terapia con Underdog International.
«Ella y yo hablaremos en las escuelas y trabajaremos con los jóvenes», dijo Kasey.
«Sé que lo que le sucedió a Maggie fue horrible, pero si su historia puede educar e inspirar a otros a hacer el bien, al menos podemos poner de nuestra parte para que este mundo sea un poco más brillante».
Kasey, no podemos agradecerte lo suficiente por darle a Maggie una segunda oportunidad que obviamente se merece en la vida.
Mientras tanto, Maggie ha mostrado una valentía y una determinación que nosotros desearíamos igualar. Le deseamos a esta perra luchadora lo mejor para seguir adelante.
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