Historias como las de Bosco suceden a diario y muchas veces los animalitos rara vez logran volver a ver a sus dueños.
Afortunadamente, Bosco tuvo más suerte, aunque al principio no lo pareciese.
El perro se encontraba merodeando la zona cuando olisqueó algo delicioso. Cuando se acercó para pegarle un bocado quedó encerrado en una jaula. ¡Era una trampa!
Por suerte, sus captores no querían hacerle daño sino todo lo contrario. Le cuidaron y trataron de dar con su dueño.
Así es como descubrieron que llevaba dos años perdido y que su dueño se había mudado hace tiempo lejos del lugar.
Sus salvadores le llevaron junto a él, quien vivía a 6 horas de auto y no podía trasladarse por ser discapacitado.
El dueño de Bosco todavía no se explica cómo logró sobrevivir durante dos años completamente solo.
Qué maravilla la labor de estas personas que han permitido que Bosco recupere su hogar y a su dueño a su tan querido amigo.
Por favor, comparte esta historia con final feliz con tus amigos amantes de los animales.