A mi me gusta inventarme cosas y proyectos en la casa y me encanta trabajar con las manos. Pero muchas veces me rindo porque no tenga mucha paciencia, así que prefiero trucos relativamente fáciles. Este es uno de esos trucos que todos pueden hacer en la casa. Y lo único que uno necesita es una vieja silla de plástico.
Las sillas de plástico habían estado estorbando por mucho tiempo en el porche de la bloguera Cherie Maries.
Así que ella decidió hacer alg y le quitó las piernas a las sillas.
Después de haber pintado las sillas en diferentes colores su proyecto estaba listo.
“Ahora son perfectas para utilizar para sentarse al lado de la piscina si uno sólo quiere meter los pies al agua. Además los colores le dan vida al ambiente”, escribe la bloquera en Hometalk donde ha compartido su súper truco.
¡Miren! No puede ser más fácil. Y queda lindo y al mismo tiempo es práctico.
