
La casa en la pradera fue más que una serie de televisión, fue una historia que conmovió a generaciones y creó recuerdos que aún perduran.
Ahora, nos ha llegado la desgarradora noticia de que una de las queridas actrices de la serie nos ha dejado para siempre. Patty Maloney, quien interpretaba el papel de Alice Bates, ha fallecido a la edad de 89 años.
El fallecimiento de su padre cuando ella tenía siete años
Un icono se nos ha ido, pero su legado vivirá en nuestros corazones. Patty Maloney, la querida actriz más conocida por su papel en La casa de la pradera, ha fallecido a la edad de 89 años.
Su hermano, Dave Myrabo, compartió la triste noticia con The Hollywood Reporter, confirmando que Maloney falleció el lunes 31 de marzo, después de luchar contra múltiples derrames cerebrales en los últimos años.
Patricia Anne Maloney, nacida el 17 de marzo de 1936 en Perkinsville, Nueva York, se hizo conocida por su amplia gama de papeles en televisión y cine. Con una estatura de solo 119 cm, la trayectoria de Maloney en el mundo del espectáculo comenzó a la temprana edad de tres años, cuando apareció en Broadway. Tras la muerte de su padre, cuando tenía siete años, se mudó con su familia a Winter Park, Florida, donde fue criada por su madre y su padrastro.
En su juventud, Maloney mostró su talento en varios espectáculos itinerantes, actuando en carnavales durante los veranos y pasando un año con el circo Ringling Bros. and Barnum & Bailey. Estudió en la Universidad de Florida, donde se formó como operadora de perforación de teclados, y más tarde trabajó para National Airlines en Nueva York.
Dentro de su traje de Lumpy
Allí conoció a Joseph Vitek, un impresor de Chicago con quien se casó en 1961. La pareja se estableció en Chicago hasta que Vitek falleció trágicamente de melanoma en 1968.
Tras la muerte de su marido, Maloney volvió a la industria del entretenimiento y trabajó con los hermanos Krofft en su espectáculo de marionetas Fol-de-Rol.
Consiguió reconocimiento por su interpretación de Honk en Far Out Space Nuts y se ganó los corazones como Lumpy, el hijo de Chewbacca, en el Star Wars Holiday Special de 1978.
En una entrevista de 2008 con Scott Kirkwood, con motivo del 39 aniversario del especial, Maloney reflexionó con cariño sobre su papel:
«Fue mucho trabajo, pero también muy divertido. También fue genial estar involucrada con todos los demás personajes». También compartió algunos detalles interesantes sobre su disfraz de Lumpy, revelando que estaba hecho de cabello humano real:
«No era tan incómodo, solo que hacía mucho calor, muchísimo calor. Apenas había lugar para respirar de verdad porque la boca tenía que estar cerrada la mayor parte del tiempo… Recuerdo un par de veces en las que tuve que subir corriendo los escalones del árbol, desde abajo, mientras me perseguían, y subir corriendo por el árbol hasta mi habitación… Había alguien allí de pie que me abría la boca y me metía una pajita para que pudiera respirar y tomar algo de oxígeno, ¡oxígeno bueno y limpio!
Alice Bates en La casa de la pradera
Su carrera televisiva abarcó numerosos programas, con apariciones en Donny y Marie, Los ángeles de Charlie, Vacaciones en el mar y Buck Rogers en el siglo XXV, donde interpretó a la camarera robot Tina. Pero muchos recordarán con más cariño a Maloney por su papel de Alice Bates en la novena y última temporada del drama histórico en 1982. Entre sus créditos cinematográficos se incluyen El señor de los anillos (1978), Under the Rainbow (1981), Los piratas del hielo (1984) y Ernest salva la Navidad (1988). Maloney también prestó su voz a Darla Hood en la versión animada de Los pequeños granujas.
«Para ser una persona pequeña que creció en un mundo grande, hizo todo lo que quiso», compartió su hermano, Dave Myrabo. En 2010, la salud de Patty Maloney comenzó a deteriorarse cuando le diagnosticaron degeneración macular relacionada con la edad (DME).
A Maloney le sobreviven su hermano, su cuñado Vic y sus sobrinas Jennifer y Laura.
La voz y las inolvidables interpretaciones de Patty Maloney perdurarán para siempre en los corazones de quienes admiraron su trabajo.
Su talento, amabilidad y dedicación a su oficio conmovieron muchas vidas, dejando un legado duradero. Descanse en paz, Patty. Siempre serás recordada.
LEER MÁS:
Errores y meteduras de pata poco conocidas en La casa de la pradera