El ajo es uno de esos ingredientes imprescindibles en mi cocina, lo uso en muchos platos porque consigue darle un toque especial y exquisito a muchos platos. De acuerdo que el olor que nos queda después no es el mejor del mundo, ¿pero y lo bien que huele cuando lo estás cocinando? ¡¿y lo bien que sabe?! Pero además de dar un toque riquísimo a la comida, ¡es muy sano! Te contamos cuál es la mejor forma de comerlo para maximizar los beneficios evitando el mal aliento.
El ajo es un alimento muy completo que podemos añadir a muchos platos, le da un toque riquísimo y además es muy sano. Entre sus propiedades probadas científicamente podemos contar sus antioxidamente, que pueden ayudar a prevenir el Alzheimer y la demencia, también ayuda a reducir el estrés oxidativo en personas con hipertensión, mejora los niveles de colesterol, lo que puede disminuir el riesgo de enfermedades cardíacas, ayuda a prevenir resfriados, gripes, etc. En esta lista puedes leer sobre sus numerosas propiedades.
Pero aunque me encanta cocinar con ajo, parece ser que el ajo crudo es más sano y beneficioso. Ya sabemos que su el ajo crudo no está tan bueno y está muy picante, pero te ofrecemos una solución, en el siguiente vídeo, para maximizar sus beneficios para tu salud comiéndolo crudo de la forma más sabrosa posible, y sin que te quede mal aliento:
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