La pareja había estado casada durante más de 50 años. Compartían todo, excepto una cosa. La mujer tenía una caja de zapatos en su armario que su marido tenía prohibido tocar. El hombre nunca prestó mucha atención a la caja, nunca pensó que pudiese haber nada de valor. Incluso llegó a olvidar que la caja estaba ahí. Hasta el día en que hospitalizaron a su esposa.
La mujer estaba muy enferma cuando la llevaron al hospital. Ella pensaba que sus días se acababan y le dio a su marido permiso para que fuese a su casa y mirar la caja. Él sacó la escalera para poder acceder a la parte alta del armario, donde estaba la caja. Cuando la abrió, no podía creer lo que veían sus ojos. Las piernas comenzaron a temblarle mientras estaba subido aún en la escalera.
En la caja había dos muñecas de ganchillo rellenas con un montón de billetes. Cuando contó el dinero comprobó que había alrededor de 85.000 dólares. Asombrado, volvió al hospital para pedirle explicaciones a su mujer.
Ella le contó: “Justo después de nuestra boda mi abuela me reveló el secreto que hay detrás de un matrimonio feliz: no pelearse. Si yo me enfadase contigo, tendría que morderme la lengua, calmarme y tejer una muñeca”.
El hombre se quedó muy conmovido con la confesión, sólo había dos muñecas en la caja, lo que interpretó como que ella sólo se había enfadado dos veces durante todo su matrimonio. Abrumado, besó a su esposa con amor. Después le preguntó a su mujer de dónde procedía todo ese dinero que había en las muñecas. ”Ah”, dijo ella, ”es el dinero que gané con la venta de las otras mueñecas”.
No sé si esta historia es cierta o inventada, pero la verdad es que es muy buena. Independientemente de la veracidad, creo que nos puede enseñar algo y además nos ha hecho reír. Para esta mujer la lección llega quizá un poco tarde, pero consiguió ser rica de golpe :). Comparte esta divertida historia y su mensaje con todos.