Shellie Tucker se puso feliz con la noticia de que estaba embarazada. Y en la semana 20 se enteró que estaba esperando mellizos.
La familia empezó a prepararse para la llegada de los mellizos y ahora tenían que comprar el doble de todo. Pero luego cayó la próxima bomba. No eran mellizos normales, eran mellizos siameses.
Médicos, especializados en embarazos complicados, le hicieron varias pruebas a Shellie, y le dieron el consejo de abortar. Los médicos pensaban que las niñas no iban a sobrevivir al separarlas.
Pero Shellie y Greg no habían perdido la esperanza. Ellos querían darle una oportunidad a sus hijas. En el hospital de niños en Philadelphia los médicos vieron la oportunidad que los bebés sobrevivieran.
En marzo 2011 las mellizas siamesas, Allison y Amelia, nacieron.
– Gritaron cuando salieron, fue el sentimiento más maravilloso que he sentido en mi vida, le dice la mamá Shellie a ABC News.
Cuand Allison y Amelia tenían 8 meses las operaron. Un grupo de 40 médicos y enfermeras lucharon para separar a las niñas. Y afortunadamente la operación fue exitosa y las dos niñas sobrevivieron.
– Ver las dos niñas, cuando las habían separado, fue los más maravilloso del mundo, dice el papá Greg Tucker.
Ahora ha pasado más de un año y Allison y Amelia viven una vida normal, como cualquier mellizas. Me pone muy feliz ver que las dos están bien.
– Yo estoy agradecida cada día. No lo puedo describir. Ver las niñas, verlas montarse a cosas…es realmente un milagro, dice la mamá Shellie.
Y yo estoy completamente de acuerdo. ¡Esto es una historia fantástica!
Aquí puedes ver un vídeo sobre Allison y Amelia:
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