En noviembre de 2015 esta joven madre de California hizo algo muy sencillo pero muy importante.
Brandie Wood es madre de los gemelos Blaine y Rylie, y decidió hacer un pequeño experimento en casa que reveló una triste verdad sobre cómo la tecnología afecta a la vida de muchas familias.
Brandie, quien solía publicar fotos de ella con sus hijos en Facebook, compartió un experimento en Facebook y su publicación se extendió como la pólvora.
«Hoy he hecho una prueba, me he quedado mirando a mis hijos mientras jugaban», escribe Brandie.
«Me senté en una esquina de la habitación y conté – y anoté – cuántas veces me miraban por varios motivos: para ver si había visto sus graciosos movimientos, para buscar aprobación o para ver si había algo que a mí no me gustaba. Todo el tiempo buscaban la reacción de su madre».
Abajo te contamos lo que Brandie descubrió cuando miró las anotaciones que había tomado durante su experimento…
Con todos los nuevos aparatos tecnológicos que tenemos, especialmente los jóvenes (perro no solo ellos) están tan pendientes de sus ordenadores, tabletas y teléfonos móviles que no prestan atención a lo que pasa en el mundo real, a su alrededor.
Pero incluso los padres pueden ser muy dependientes de estas herramientas tecnológicas.
Hace unos días Brandie Wood, de California, hizo una sencilla prueba en casa. Después escribió abiertamente sobre el resultado en Facebook.
Brandie escribió:
«Hoy he hecho un experimento. Me he parado a mirar a mis hijos jugar. Me senté callada en una esquina de la habitación y conté cuantas veces me miraban por distintos motivos: para ver si había visto sus graciosos movimientos, para buscar aprobación o para ver si había algo que a mí no me gustaba. Todo el tiempo buscaban la reacción de su madre».
No puedo dejar de preguntarme, si yo hubiese estado con mi teléfono o mirando el ordenador, ¿qué clase de mensaje les habría mandado?
28 veces se habrían preguntado mis hijos si internet y el teléfono eran más importantes que ellos. 28 veces mis hijos no habrían tenido la atención que incluso los adultos buscan.
28 veces mis amores se habrían preguntado si estaban solos. 28 veces mis hijos hubiesen estado seguros de que lo que hay en la pantalla es lo que realmente importa.
En un mundo en el que parece que nos aceptamos a nosotros mismos en función de cómo los demás nos perciben, en lugar de por lo que de verdad somos, en un mundo en el que nuestro valor depende de cuántos seguidores y ´me gusta´ conseguimos, en un mundo en el que nos comunicamos más con nuestros seres queridos a través de un mensaje de móvil que en persona, en ese mundo, te pido que te pares a pensar.
Dejar tus aparatos tecnológicos y dedicar más tiempo a tu familia y a tus amigos.
La próxima generación espera que le enseñemos a ser adultos, así que procura no estar demasiado ocupado en las redes sociales, no sabes nunca quién te mira y qué mensaje le estás enviando.
El pontente mensaje de Brandie se ha compartido 70.000 veces.
Esta madre dice que está muy contenta de saber que su mensaje ha llegado a tantas personas, de cerca y de lejos.
”Las personas tenemos el poder de afectar la vida de otras personas», cuenta Brandie.
”Solo ser consciente de eso ayuda mucho”, cuenta Brandie a The Huffington Post.
”Reconozco que miro demasiado el teléfono, pero mi pequeño experimento me ha hecho más humilde y consciente de esto», cuenta Brandie.
El mensaje de Brandie es un potente recordatorio de que deberíamos dejar de mirar el teléfono más y dar más tiempo a las personas que queremos.
Si tú también piensas que más personas deberían mejorar en este sentido, COMPARTE ESTE MENSAJE.
