Lisa Wilson y su prometido, Robert Pantoja, habían planeado una gran boda, con muchos invitados, música, buena comida... El tipo de boda con la que muchas personas sueñan. Pero de repente el plan se derrumbó cuando se supo que no podía asistir el invitado más importante, el padre de la novia.
En lugar de en una iglesia llena de gente, la ceremonia se celebró en el hospital. El padre de Lisa estaba enfermo de cáncer en fase terminal y no podía abandonar el hospital. La pareja decidió celebrar la ceremonia con la familia más cercana frente a la cama de su padre enfermo.
Los novios se prometerion amor eterno y entonces la novia hizo algo que me hizo no poder contener las lágrimas.
Todo quedó grabado por la cámara de teléfono y ahora estas imágenes de la fuerza del amor se difunden rápidamente por internet. Abajo puedes ver el vídeo. No hace falta entender ni una de las pocas palabras que se dicen para comprender los sentimientos, estos son un idioma internancional, el más potente de los idiomas.
El padre de la novia murió un mes después, pero pudo asistir a uno de los momentos más importantes de la vida de su hija. Y seguro que para la novia no pudo haber mejor boda. Su padre estuvo a su lado.