Tal vez suena muy normal, pero la profesión de los peluqueros es mucho más importante de lo que creemos. Porque a veces algo tan fácil como un cambio de peinado puede ayudarnos mucho para que nos sentamos mejor y más fuertes – por fuera y por dentro.
Pregúntenle por ejemplo a la abuela Mary Johnsen – o pregúntenle a la estilista Kayley Olsson, que hace poco se enfrentó a unos de los retos más difíciles en su vida profesional.
La cliente de Kayley era una chica joven que estaba luchando contra una depresión, estaba tan mal que ni podía peinarse ella misma.
Fue hace poco que la niña de 16 años entró al salon de Kayley.
El pelo de la chica estaba muy, muy gastado – al mismo tiempo se acercaba la hora de tomar la foto anual en el colegio.
Ahora ella le pidió a Kayley que le «afeitara todo el pelo» ya que se sentía tan mal que no era capaz de peinarse.
Pero Kayle nola iba a rapar. Ella la quería ayudar.
”¡Honestamente me partó el corazón así que hicimos todo lo posible para mantener el pelo de esta niña!», escribe Kayley Olsson en Facebook.
Así que en vez de sacar la afeitadora Kayley trabajó 13 horas con el pelo de la niña. Le quería hacer una transformación y remplazar el pelo descuidado con un peinado nuevo y lindo. ¡Y el resultado es maravilloso!
El esfuerzo de Kayley significó muchó para la niña, no se trataba solamente de un peinado nuevo.
«Después de haber estado 8 horas ayer y 5 horas hoy por fin hemos hecho que esta hermpsa niña sonria y sienta que ella ES importante», escribe Kayley Olsson en Facebook y sigue:
”Las últimas palabras que me dijo fueron: ‘Yo voy a sonreir en la foto del colegio hoy, tu me hiciste sentir como yo misma otra vez'».
El encuentro con la joven deprimida conmovió tanto a Kayley que ella escribió sobre todoo en Facebook.
Ahora espera que el mensaje, que ha tenido cientos de mensajes en unos pocos días, le enseñe algo a mucha gente por todo el mundo.
«LA SALUD MENTAL es una cosa que afecta a personas por todo el mundo, de todas las edades. PADRES, tomen esto enserio, no le digan a sus hijos de tratar de olvidar algo que no lo pueden hacer. Un NIÑO NUNCA debe sentirse tan mal que no sea capaz de peinarse», escribe kayle.
Estoy tan contenta que esta niña pudo ir al colegio con una sonrisa otra vez. Nadie debe sentirse tan mal como lo hizo ella.
Comparte este artículo para difundir el importante mensaje de Kayle para que más personas que se sientan mal encuentren apoyo.