La madre se despide de la hija enferma. Pero ahí la mamá siente algo en la mano que cambia todo.

Los milagros ocurren. La bebé Bella, de casi 2 años, de Inglaterra, es una prueba de esto. Sus padres habían perdido la esperanza y se habían despedido. 30 minutos después todo iba a cambiar.  

Francesca y su esposo Lee Moore-Williams de Inglaterra estaban de vacaciones en España con su bebé Bella de 18 meses. De repente vieron cuando se le empezó a caer el pelo a la hija. Cuando regresaron a casa se fueron inmediatamente para el hospital.

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Los médicos pudieron constatar que la hija tenía deficiencia de vitamina a causa de un virus. Su cuerpo no podía producir lo que necesitaba.

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Pocos días después el estado de Bella estaba tan critico que la pusieron en respirador. Le diagnosticaron una enfermedad que significa que tiene deficiencia de biotina. Es una enfermedad muy poca común. 1 de 60 000 bebés recién nacidos tienen la enfermedad. La biotina ayuda a que la células del cuerpo crezcan de una forma natural.

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Semanas después el estado de la bebé estaba peor. Francesca y Lee se prepararon para lo peor: tenían que apagar el respirador. Bella no iba a sobrevivir. La familia se reunió en el hospital, tomaron una última foto con Bella y son su hermano Bobby, de 5 años, y se despidieron.

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Pero en 30 minutos todo cambió. Pasó un milagro.
– Yo la tenía de la mano y sabía que estaba tomando sus últimos respiros. Yo sentí como soltó mi mano, pero de repente agarró mi dedo, le cuenta el papá Lee a Telegraph.

Bella se empezó a mover y a gritar mientras que sus padres le tomaban sus manos. Ella estaba luchando por su vida. Los médicos hicieron todo lo posible para salvarle la vida a la pequeña niña.

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El oxígeno de Bella subió a un nivel normal – ella iba a sobrevivir. Esto no fue nada más que un milagro y los médicos estaban en choque. Hoy en día han pasado 5 meses desde el dramático hecho. Bella sigue teniendo la enfermedad, pero se puede tratar con medicamento.

La salud de Bella se va mejorando por cada día. Su pelo le creció otra vez y ella puede caminar y hablar. Ella pasó la navidad en casa con su mamá Francesca, su papá Lee y con su hermano mayor Bobby. ¡Maravilloso!

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Fuente de fotos: Facebook.

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