Nadina usó a su propia madre para demostrar como, con unos simples procedimientos, se puede mejorar la apariencia de los pacientes con cáncer.
La madre de Nadina, con la piel muy pálida, se sentó en una silla para que su hija Nadina iniciara su transformación.
Primero delineó las cejas y luego retocó la piel de su madre para que tuviera el mismo color y vitalidad que tenía antes del tratamiento con quimioterapia.
La mamá no podía creer lo que veían sus ojos cuando ella terminó.
Finalmente, Nadina le colocó una peluca con mucho estilo. Su mamá no tiene nada que ver ahora con la mujer que apareció al principio del vídeo.
Por favor, mira su hermosa trasnformación aquí abajo:
Personalmente, no creo que la apariencia lo sea todo en el mundo, pero no puedo evitar emocionarme al ver la sonrisa de la madre al final del video. Realmente demuestra cuánto significa esto para ella.
Por favor, comparte esta increíble transformación en Facebook para honrar el fantástico gesto de esta hija hacia su madre.