La muerte de un hijo es lo más devastador que puede vivir una madre o un padre.
Cuando algo tan terrible ocurre, lo único que pueden hacer los padres es intentar darle lo mejor, igual que seguro hicieron en vida.
El pequeño Max falleció cuando solo tenía 4 años, y su madre quería un lugar decorado con amor para que descansase el resto de su días. Esta madre soltera quería la lápida más especial para la tumba de su hijo.
Max Corbett-Gardener dejó este mundo cuando solo tenía 4 años. El pequeño sufría una severa epilepsia que se complicó y acabó con su vida.
Su madre, Jo Corbett-Gardener, quedó destrozada.
Esta madre soltera de 42 años quiso entonces dar a su hijo la lápida más especial posible, y decidió que fuese en forma de estrella con un osito sobre ella. Ahorró durante mucho tiempo hasta conseguir las 3.000 libras que necesitaba para el precioso homenaje a su hijo, escribe Daily Mail.
La lápida fue puesta en la fecha del que hubiera sido su cumpleaños número 7, el 31 de mayo. El lugar, el cementerio de Malvern, en Inglaterra.
3 días después, la lápida había desaparecido
Cuando 3 días después la madre fue a visitar la tumba de su hijo, la lápida no estaba.
Al parecer otra familia de la localidad se había quejado y las autoridades locales la quitaron. Jo cuenta a Daily Mail que nadie la avisó, no sabía nada de que iban a retirar la lápida de su hijo.
El ayuntamiento de Malvern dice que la denuncia fue motivada porque la tumba de Max está en la zona de adultos, si esa lápida hubiese estado en la zona de enterramiento de niños, no hubiese habido problemas, pero en la de adultos no está permitido este tipo de lápidas. Por esa razón, tras la denuncia la tuvieron que retirar, ya que fue colocada, además, sin solicitar el premiso que se requiere.
Jo, madre de dos hijos más, Zoe, de 16 años, y TJ, de 5 años, dice que se siente «enfadada y angustiada», y añade: «Hemos sufrido mucho, y lo hubiese entendido si la tumba hubiese estado descuidado o de mal gusto, pero no es el caso. La lápida significa mucho para la familia, y ahora luchamos para se pueda volver a poner. Solo queremos tener un lugar donde llorar».
Las autoridades dicen que fue una decisión muy difícil de tomar, y que ahora se van a reunir con la madre para ver cómo lo pueden solucionar.
Espero que puedan arreglarlo para que Max pueda tener la lápida que se merece y sea en la Tierra la misma estrella que en el cielo. Comparte para mandarle tu apoyo a la familia.