Michael Coyne, de Rhode Island, EEUU; estaba cansado de no conseguir trabajo por culpa de su autismo. Él se sentía con energía para trabajar y sabía que llegaría lejos si tenía la oportunidad.
Con 21 años Michael decidió que él mismo tenía que hacer algo. Y entonces abrió su propia cafetería. Ahora ha hecho su sueño realidad, abriendo las puertas a todos los clientes. Espera poder contratar a otros que tienen dificultad en conseguir trabajo.
Inició un curso de negocio
Cuando Michael quiso abrir una cafetería se dio cuenta de que debía prepararse y estudiar primero. Inmediatamente se inscribió en un curso de negocios, adaptado para personas con discapacidades, y supo sacar el máximo rendimiento con plena capacitación.
Una madre orgullosa
Michael estaba ansioso por comenzar y dedicó mucho tiempo a trabajar en su cafetería. Tenía la ayuda de su madre que no podía estar más orgullosa de su hijo.
«Lo que me gusta de la idea del café es la comunidad. Aprendemos mucho los unos de otros. Le decimos a la gente: ‘Es verdad que él tiene una discapacidad, pero solo mira de lo que es capaz’. Al mismo tiempo, estás con el público y se aprende a comprender mejor los códigos sociales», dice la madre de Michael a CBS News.
Ahora, el café de Michael, Red, White and Brew, lleva abierto más de dos meses, y el negocio se sigue desarrollando.
Esperemos que ahora pueda contratar a otros con discapacidades y que tienen dificultad de encontrar trabajo por culpa de ello.
Michael no se detuvo porque no encajaba en la norma. Es una verdadera inspiración para los demás. Por favor, comparte para rendir homenaje a esta excelente persona.