
El tiempo vuela sin que nos demos cuenta, pero con la ayuda de fotos podemos mantener los recuerdos vivos, y es muy fácil volverse nostálgico viendo álbumes con fotografías viejas.
Este padre y su hijo decidieron tomarse la misma foto una vez al año durante 28 años.
De foto a foto se puede ver cómo cambia la vida: el niño pequeño se convierte en un hombre joven, y cómo el hijo se vuelve más y más parecido a su padre, casi parecen la misma persona.
Pero en la última foto, algo ha cambiado...
1986

1987

1990

1994

1997

1998

1999

2002
Por un momento pensé que estaba viendo dos versiones de Bruce Lee en esta foto – ¡cuánto se parecen!

2007

2013

2015

¡El ciclo está cerrado después de 29 años!
Esperemos que esta nueva generación siga manteniendo viva esta tradición maravillosa.
¡Comparte esta bonita serie de foto si sientes que la familia es lo más importante de todo!
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