Debra Paget era extremadamente bella en sus mejores tiempos y encandiló a millones de teleespectadores cuando protagonizó el debut cinematográfico de Elvis Presley, Love Me Tender. La talentosa actriz fue «tocada por la mano de Dios», según el legendario director Cecil B DeMille. Al parecer, hasta el ‘Rey del Rock and Roll’ se obsesionó con ella…
Debra Page nació el 19 de agosto de 1933 en Denver, Colorado, Estados Unidos. Su verdadero nombre era Dabralee Griffin, pero se lo cambió a medida que avanzaba hacia el estrellato cinematográfico.
Se crió en una familia del mundo del espectáculo, los padres de Debra se trasladaron a Los Ángeles en los años 30 para poder estar más cerca del desarrollo de la industria cinematográfica en Hollywood. Las dos hermanas de Debra, Tala Loring y Lisa Gaye, también tuvieron importantes carreras en el cine y la televisión.
Debra, que siempre quiso ser bailarina, se ha descrito a sí misma como un bebé «post depresivo». Vino al mundo durante una recesión económica y su familia no tenía mucho, pero Debra tenía a sus padres en alta estima. «Cuando miro atrás, veo que en nuestra casa había mucho amor», dijo Debra al ser entrevistada por Dale Evans Rogers.
‘Las piernas más bonitas del mundo’
Empujada por su madre, Debra se matriculó en la Escuela Profesional de Hollywood cuando tenía 11 años. Esta talentosa joven nunca dudó de sí misma y consiguió su primer trabajo profesional a los ocho años. Poco después, protagonizó una producción de Las alegres comadres de Windsor, de Shakespeare.
Su carrera cinematográfica comenzó a los 14 años, y su gran oportunidad le llegó en 1950, cuando fue elegida para el reparto de Broken Arrow. Junto a James Stewart, Debra Paget interpretaba a una doncella nativa americana llamada Sonseeahray («Estrella de la mañana»). Su aspecto «exótico» le valió varios papeles en películas de aventuras, y pronto se ganó la reputación de ser la única actriz que nunca había sido besada.
En la década de los 50, la Asociación Nacional de Fabricantes de Medias le otorgó el título de «Las piernas más bonitas del mundo» en una encuesta realizada a 15.000 personas del sector. La profundamente religiosa Debra ganó por un amplio margen, según The Baltimore Sun.
A los 14 años, Debra había firmado un contrato exclusivo con 20th Century Fox. Pero fue cuando Paramount Pictures tomó prestada a Debra para Los Diez Mandamientos cuando fue lanzada al estrellato, con su película de mayor éxito.
Debra interpretó el papel de Lilia, la niña del agua, en la gigantesca y espectacular película bíblica de Cecil B. DeMille. La Debra de ojos azules tuvo que llevar lentillas marrones, algo que le causó bastantes problemas. «Si no hubiera sido por las lentillas, no me habrían dado el papel. Era horrible trabajar con ellas porque las luces klieg las calentaban», dijo. La película, ganadora de siete premios de la Academia, cambió su vida para siempre. «Fue probablemente el punto álgido de mi carrera», afirma Debra.
Encuentro con Elvis
Debra Paget era una estrella consagrada de Hollywood de 22 años cuando pisó el plató de Love Me Tender. Por aquel entonces, era probablemente la actriz más bella de la edad de oro de Hollywood. Y eso es mucho decir.
Ella y Elvis Presley se conocieron meses antes, cuando ambos aparecieron en el Show de Milton Berle el 5 de junio de 1956. Fue el momento en que Elvis escandalizó a la América conservadora al girar su famosa pelvis durante su ahora icónica interpretación de Hound Dog.
«Aunque no suelo formarme una opinión de una persona hasta que la conozco», explicó, «francamente, esperaba mi primer encuentro con Elvis Presley con sentimientos encontrados. Había oído y leído mucho sobre esta joven sensación del canto de Tennessee, y la mayoría no eran elogios.»
El joven cantante sorprendió a Debra de muchas maneras durante su primer y memorable encuentro. Como cristiana renacida, podría pensarse que a Debra le disgustaba El Rey, pero fue todo lo contrario. Cuando el Sr. Berle presentó a la estrella emergente de 21 años a Debra, le cogió la mano con firmeza y le dijo: «Encantado de conocerla, Srta. Paget».
A continuación, Elvis estrechó la mano de su madre con «igual vigor», se excusó y un par de minutos después volvió con una silla para ella. «Estuvimos juntos solo un par de horas, pero a veces puedes aprender más sobre una persona en un corto espacio de tiempo que en semanas de vernos constantemente. Sentí que lo había hecho. Desde el principio, Elvis me impresionó como un joven agradable, sincero y servicial», recuerda Debra.
La propuesta
Unos meses más tarde, Debra protagonizó junto a Elvis Love Me Tender, la primera película del cantante. Según el Daily Express, Elvis se obsesionó con su compañera de reparto. Creía que Debra era «la chica más guapa que había visto nunca» e incluso visitó la casa de sus padres.
«Desde la primera vez que vino a casa, mis padres han considerado a Elvis un miembro del clan Paget, un sentimiento que, creo, él correspondía», explicó Debra. Pero la relación entre Debra y Elvis era más familiar que romántica, al menos a los ojos de la joven actriz.
«Yo era muy tímida, muy callada y muy inmadura para mi edad. Tenía poco más de 20 años, pero emocionalmente era más como una chica de 16 años. Elvis y yo éramos un par de niños».
Elvis, sin embargo, parece haber pensado lo contrario. «Después de la película, me pidió que me casara con él, pero mis padres se opusieron. Yo quería a Elvis, pero como no soy de las que desobedecen a sus padres, no me casé», cuenta Debra.
Al final, Debra rechazó a Elvis, ya se había enamorado de Howard Hughes, famoso productor de cine y multimillonario. Debra se casaría más tarde con el actor y cantante David Street, pero siempre habló con cariño de Elvis. Y Elvis tampoco se olvidó de Debra, muchos creen que ella marcó la pauta para la fijación de Elvis con el «look Debra Paget». Por ejemplo, se dice que la joven Priscilla Beaulieu cambió su peinado y maquillaje cuando supo de Debra.
Debra dejó el mundo del espectáculo en 1964 y ahora tiene 89 años. Lamentablemente, no hay mucha información sobre su vida actual, Debra parece llevar una vida tranquila y privada, alejada de los focos.
Elvis y Joan Blackman
Curiosamente, la propuesta de matrimonio de Elvis a Debra a finales de los años 50 no fue la única vez que el rey del rock quiso casarse con una co protagonista. Después de rodar Blue Hawaii con Joan Blackman en 1961, también quiso casarse con ella, mientras salía con Priscilla.
Joan Blackman, que se parecía mucho a Priscilla, ha contado lo que realmente ocurrió durante el rodaje de Blue Hawaii. «Cuando nos vimos por primera vez (en 1957), había una chispa, una magia en el aire… Había algo especial entre nosotros, a veces tan cálido y maravilloso que casi podías alcanzarlo y tocarlo», declaró al periódico Midnight Globe en 1977.
En la sensacional entrevista, Joan Blackman dijo que Elvis «realmente la quería» como esposa y que le rogó repetidamente que apareciera en sus películas, pero ella lo rechazó todas las veces. «Quería papeles por mi capacidad, no porque saliera con Elvis», declaró.
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