Durante toda su infancia, Andrew de León se había sentido como un extraño. Era diferente a los demás. No compartía ningún interés con su familia o amigos - pero poco a poco Andrew encontró su refugio en la música. Allí se encontraba seguro y a gusto consigo mismo, incluso aunque no se había atrevido a cantar en público nunca.
Con 19 años todo cambio. Andrew decidió presentarse al concurso americano de nuevos talentos. Sería la primera vez que este adolescente autodidacta iba a actuar delante de un público - pero como de costumbre se encontró con las miradas escépticas de la gente en cuanto entró en el escenario.
Con su estilo gótico, Andrew sobresalía de inmediato del resto de la gente y el jurado se percató rápidamente de que era diferente. Le hicieron algunas preguntas cortas y todos esperaron a que el resultado fuera un desastre - nadie se esperaba que este chico de 19 años pudiera mostrar algo especial.
Tan pronto como Andrew empezó a cantar, demostró un tono de voz deslumbrante - y para el asombro del público la melodía interpretada era de la opera clásica 'O mio babbino caro'.
Esta mágica actuación concluyó con una ovación del público y un interminable elogio a su voz por parte del jurado. Nuevamente se demuestra que nunca se debe juzgar un libro por su cubierta.
¡Escucha y disfruta de esta emotiva actuación!
La actuación comienza en dos minutos.
¡Comparte esta publicación para mostrar que nunca se debe juzgar por las apariencias!